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La tentación de existir

El Dogon dijo: "Incluso Dios, por mucho que nos intrigue es una capital de muecas". Domingo, Lunes, alegría fulminada. ¡Estrellas que brillan oscuramente! ¡Ciudades inaudibles! ¡¡Oh Bob, Oh Bob!!! Escucho "La Serpiente Emplumada" de ""Sacred Idol, jungle jazz de 1960, a la medida de nuestro agobio y nuestra trepidación. Para bajar, Stravinsky + exotica, columpio entre terrores elegantes y la belleza del mundo.


I. ¿Qué hay dentro de las latas que venden sexo en lata?. Deambular como mono-humanoides por los boliches de Tokio, 1, 2,3, 4, 5 vasos de sake, se compra la lata de sexo en el vendedor automático, machacársela impunemente con la vagina de gomaespuma detrás de un puesto de panchos, acción. Sólo falta el pájaro cagándonos en la cabeza, que a esa hora, duerme. En lugar de dejar al tiempo triturarnos lentamente, hemos creído oportuno –lata en mano– en un momento frenar y pensar: ¿Cómo llegué hasta aquí? ¿Y cómo llegamos aquí desde la sopa primordial?

II. A fin de año habrá 50 millones de blogs; animales de alcantarilla atacando a los de la superficie. Blog de secretos anónimos "A los clientes que me tratan mal, les llevo café descafeinado"

Los griegos no estaban para el cretinismo todoterreno de un Dios único, solemne y hombre: poblaron el Olimpo de dioses y diosas que se llevaban a las patadas y se burlaban de los dioses menores. Luego sigue un instante de oscuridad equivalente a unos 20 mil años.

III. Conclusiones preliminares de por qué a veces los gatos atacan a sus dueños cuando los están acariciando: 1) Respuesta al éxtasis de ser acariciados 2) Aburrimiento, pudrirse del dueño. 3) Falta de "cosmic africalia".

Bien Mario en relación a ScissorsHands Graña: ""Mirá que una vez que pasás al otro lado es como en Star Wars...".







IV. Sujeto encuentra la manera de quedar encerrado con 11 reclusas, en cárcel de mujeres.


Flaco se te terminó el tiempo, mejor suerte la próxima vez.
Bob, agente de universos caducos, producto del Feng Shui mal orientado. Estado: surfeando en el colchón. Una civilización no existe ni se afirma más que por actos de provocación.