[Click to enlarge]Parque de diversiones abandonado
I. Quizás se haya comprendido y cada vez se comprenderá mejor leyendo esta pequeña "novela", cuan insuficiente resultaría aquí una definición brutal del status de Bob, tal como "literato", "rentista" o "estudiante permanente". Digamos, pues, y más vagamente que Bob era un veterano junior que se levantaba tarde.
Se levantaba tarde, porque se acostaba excesivamente tarde. Se levantaba tarde, porque estaba infinitamente mejor acostado que en pie. Asi circulaba la entidad Bob, cuando pretendía fijar estados de la lengua remotos y estaba consagrado a la explicación de textos desde todos los puntos de vista.
II. La piloto iraní [requiere registrarse gratis en el NYT]. Apasionada de la velocidad; es la primera mujer que compite contra hombres en automovilismo, –y en cualquier deporte– en la historia de Irán. Este marzo, gana el campeonato nacional. En lo más alto del podio, recibió su medalla.
Última cenaIII. Cuanto más sabemos, más nos cuesta recordar. Ziblets, son bichitos imaginarios, que paradójicamente puestos en serie son más fáciles de recordar que una hilera de perros, por citar un ejemplo [entelequias bastante más familiares].
Alargue
IV. ¡Atención mamá! ¡Estos Sea-Monkeys no tienen coronita!
- ¿Tiene usted una filosofía de vida, Bob? - inquirió Popo Bawa (sufre una enfermedad legítima y es posible que transporte droga en el cabello)
Bob respondió de esta manera: "Creo en el sentido de orientación de los virus, aun más cuando no tienen ojos. Archivo expedientes con todos los temas imaginables en lugares que no corresponde. Paso años buscándolos. He visto a un grupo de telépatas hacer submarinismo en pantanos blindados con ladrillos radiactivos. Vivo en una cuarentena permanente, ¿me veis detrás de las ortigas?".
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