jueves, abril 27, 2006

En el John Lennon Airport bajo los strong efectos de carpitas multiculturales

¡Qué impresición! No sé si la hora de mi muerte está escrita y no se puede cambiar o si está escribiéndose. Buscar una vena, es cosa de mandinga. Las venas son como las mujeres, aparecen a cierta hora, luego ya no están más allí.

I. Exhibición atroz. Los Rodriguez Saa han propuesto su estandarte familiar como bandera de San Luis. [gracias Martín x aclarar que no son los Saadi]. Es una bandera a cuadritos como de Fórmula 1 con pretensiones feudales, solariegas, nobles y tiránicas. La gente me mira dentro de mi Chevy Nova 62, pero no les voy a devolver mi noviecita negra.

II. Me forzaron a tomar un baño islámico hammam en el Hotel Al Madina, Essaouira, frecuentado [en sus días] por Frank Zappa, Leonard Cohen, Jimmy Hendrix. Luego me forzaron a tomar un kir royal, y luego, forzada a sesión narguile, frutos rojos. Quedé regio.

III. Uds. dicen, profundamente irritados, (foto inferior) ¡¡pero esta foto se podía sacar en Villa Gesell! Ese hombre que perdió el mehari (camello sudanés) -miren como hace trekking estilo legión extranjera- está a metros de dónde ayer cayó Echarri en su convincente papel de Montecristo :). Enfrente de estas dunas tenemos la fantasmagórica, quimérica, irreal Isla de Mogador. [No se impacienten ya subo esa isla de Traven doble]. Abandonada y complicado su acceso, hay que negociar el trayecto con dudosos boteros que a veces no llegan a puerto y lo dejan a uno como alimento de los

escualos. 2do obstáculo para llegar a la Isla de Mogador [tiene mezquita y prisión abandonadas: no tuve el coraje de hacer incursiones astrales]; allí se les ocurre reproducirse a los halcones de Eleonora, especie en extinción, cruzando todo el África desde Madasgascar. Entonces se requiere un permiso de un ente de fauna y flora marroquí. Mi pregunta es por qué el halcón de Eleonora se toma el trabajo de reproducirse en un lugar tan a trasmano similar a la Isla del Dr. Moreau.

La zona, Cabo Bojadour, es uno de las más traicioneras trampas de navegación del mundo. En 1815 James Riley y 12 marineros quedan encallados junto a la costa rocosa con la perspectiva de terminar como esclavos de los brutales nómades del desierto [no existía Bono para protejer de los abusos]. Se salvan pasando sufrimientos homéricos recorriendo los 800km hasta Mogador bajo una dieta informal de caracoles, leche de camello, sangre y orina.

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