Aquí en el siglo XXI nos gusta vernos como cerebros ambulantes con algo incambiable o que cambia muy despacio. Efectivamente cambiamos poco de un día al otro pero los componentes de las neuronas que garantizan nuestra estabilidad, los túbulos, etc. se renuevan completamente en unos pocos días. No soy el mismo set de partículas que la semana pasada [pero probablemente el mismo boludo].
I. Surfista se escuda de tiburones con la tabla de surf. La tabla queda marcada con tarascones, el tiburón de dos metros desaparece. El surfista, tranquilo en todo momento, se busca una tabla de repuesto y a los 30 minutos vuelve a surfear las olas [pese a que cierran la playa]. Estamos hablando de lugares donde hace un mes un tiburón partió en dos a un bañista que hacia snorkel.
II. La conciencia es tema complejo. Hablan y hablan de ella como si fuera algo científicamente comprobado. Pienso que desaparecerá, con el tiempo, como otras nociones. Por Ley de Moore, los microprocesadores serán el doble de poderosos y baratos cada 18 meses. Como no somos tan complejos como creemos, las máquinas pronto nos superarán [y no obligarán a hacer bailes frenéticos para su entretenimiento].
[Click to enlarge]III. Una vez que se ha creado una computadora peligrosamente inteligente, sólo es cuestión que unos "números azarosos" "la despierten". Será como esas primeras amebas inórganicas que de pronto empezaron a "vivir". En comparación con esas máquinas nuestra biointeligencia será insignificante, siguiendo el ejemplo: como la de una ameba.
IV. Vendedor [Un tipo a medio camino entre un lama agresivo y un telépata tímido]
– "Piensa en el asunto"–exclama –. "¡Un separador de crema en tu propia cocina!"
– "¡Chispas !" –le digo– "Me da vueltas la cabeza de sólo pensarlo"
– "Faltan cinco, quizás diez, si, tal vez unos veinte años...Pero la cosa se viene"
Y asi hemos llegado a esta ciudad libre de vendedores de droga, y aguantamos estrictamente en base a jarabe para la tos.
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