I. Uno de los mayores problemas con que se enfrentan los matemáticos es el de explicar a los demás de qué tratan. Los aderezos técnicos de las matemáticas, su simbolismo y expresiones formales, su desconcertante terminología, su aparente deleitarse con cálculos largísimo: todo ello tiende a ocultar su auténtico carácter. Cualquier músico se horrorizaría si oyera decir que su arte no es más que "una multitud de renacuajos dibujados sobre líneas en hileras"; sin embargo eso es todo lo que el profano puede distinguir en una página de música.
II. Comentaristas de TV desnudas, ya no sorprenden a nadie, pero que tal policías que controlen los documentos desnudas [sólo con la chapita colgada del pezón derecho mediante piercing] Zorras grises escribiendo multas sin ropas. La negociación sería imposible, la coima improbable.
Break my body, hold my bones.
III. Uno se siente estafado por las películas con voces en off porque espera la historia contada o insinuada en imágenes, sinuosas y sugerentes, no explicada por una vocecita canchera.
IV. La siguiente idea es de algo que me gustaría que exista en el futuro: uno está mirando una película y se engancha con el personaje de una bióloga que trabaja en Aquatica, un superacuario con varios subniveles donde la atracción son unos tiburones mejorados con ingeniería genética [tienen forma de tiburón pero pintitas de tigre, están en estado experimental]. Pero uno se engancha con esa doctora, entonces puede frenar la película y tiene mil opciones para que continúe la historia a su manera. Uno elige algo interesante, luego si se va aburriendo, rebobina y elige otro destino para la película. Hay infinitas opciones. Ocurriría que uno podría estar viendo la misma película por unos 5 años.
V. También estoy pensando en un concepto que podría aparecer en cualquier momento que es “DJ de películas”: asi como un disc jockey hace un remix de grandes temas del pasado –siempre con resultados infranormales-, quizás se pueda mezclar películas y lograr una nueva película más interesante.
VI. El texto de Naked Lunch en inglés.
VII. ¿Cómo puede ser que un pez de 3cm. sea más temido que las pirañas entre los nativos del Amazonas? El andiru o pez vampiro se introduce por cualquier orificio -y aquí tenemos que subrayar la palabra "cualquier"- clava una espina dentro del organismo para aferrarse y se dedica a beber sangre y comer pedacitos de carne. Hay casos de ingreso por al cuerpo humano por el torrente de orina de desprevenidos que pillaban en el río [esta circunstancia ocurre más por accidente que por diseño] y posterior instalación del intruso en la uretra. En animales ahogados que son llevados a la costa, no es extraño encontrarse con una carcaza ahuecada y a un par de candirus huir de ella. El tratamiento local con plantas [como la xagua] para disolver al parásito muchas veces provoca un shock de dolor o la muerte del afectado.
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